RIOJA EN LA ENCRUCIJADA

 

Con 63.593 hectáreas de viñedo y más de 800 bodegas inscritas, la región vinícola de Rioja es, sin lugar a dudas la más importante y prestigiosa de España.

 

Con una tradición que se remonta a más de dos milenios de antigüedad, Rioja fue la primera región española reconocida como Denominación de Origen, el 6 de junio de 1925.

 

Asimismo, en 1991 La Rioja obtuvo, también por primera vez en nuestro país, la calificación de Denominación de Origen Calificada, el más alto nivel de protección y reconocimiento legal que una región vinícola puede obtener en nuestro país.

 

En la actualidad, sólo La Rioja y el Priorat gozan de esta calificación.

 

La historia de La Rioja es una historia de éxito. Sin embargo, hoy la región se encuentra en una encrucijada.

 

Una de las particularidades del vino de Rioja es que, tradicionalmente, la categoría de sus vinos no se determina a partir de su lugar de origen, sino del tiempo de envejecimiento. Así, el Consejo Regulador establece cuatro tipos de vinos: Garantía de Origen, Crianza, Reserva y Gran Reserva.

 

Este tipo de clasificación contrasta, por ejemplo, con el tipo de clasificaciones utilizadas en Francia, país de referencia mundial en lo referente al vino de calidad. Como es sabido, los franceses establecen la calidad de sus vinos partiendo de la noción de terroir o terruño, es decir, atendiendo a las características propias y a la singularidad de ciertos viñedos.

 

En los últimos tiempos, algunos bodegueros riojanos de primera línea han manifestado su desacuerdo con el método de clasificación utilizado en La Rioja. Desde su punto de vista, dicho sistema ignora la riqueza de terruños y suelos de la región y desvaloriza los vinos de categoría mundial producidos en la zona, ya que no los distingue de manera clara de los de consumo masivo.

 

Uno de los bodegueros que ha mostrado su disconformidad de manera más enérgica es Juan Carlos López de Lacalle. Fundador de Bodegas Artadi, considerada por muchos una de las mejores bodegas de la nueva Rioja, López de Lacalle ha decidido abandonar la DOCa como protesta ante lo que considera un caso de ineficiencia administrativa.

 

Al mismo tiempo, figuras relevantes del mundo del vino a nivel internacional han intervenido en el debate proponiendo métodos de clasificación alternativos al actual.

 

Una de las más sugerencias más interesantes ha sido realizada por Tim Atkin, Master of Wine, influyente crítico y escritor inglés.

   

En un artículo publicado en su página personal, Atkin ha presentado una clasificación de las bodegas de Rioja inspirada en la metodología tradicional usada en la región de Burdeos.

 

Dicho procedimiento clasifica los vinos en Crus en función de su reputación y precio de mercado. Existen cinco categorías de Crus.

 

A continuación, os proponemos una selección de seis vinos pertenecientes a algunas de las bodegas mejor puntuadas por Tim Atkin.

 

En primer lugar, Predicador 2013 es un estupendo tinto hecho de Tempranillo y Garnacha. Está elaborado por Bodega Contador, que tiene al frente al prestigioso Benjamín Romeo.

 

Una de las sorpresas de la temporada, Valenciso Reserva 2008 es un elegante monovarietal de Tempranillo. Producido por Bodega Valenciso.

 

Seguimos con Artuke Pies Negros 2014, una fresca combinación de Tempranillo y Graciano a cargo de Bodegas Artuke.

 

Otra muestra de elegancia tradicional, Remelluri Reserva 2009 se elabora a partir de un complejo ensamblaje de variedades. Este vino de Granja Ntra. Sra. de Remelluri encarna lo mejor del clasicismo riojano.

 

El último tinto de la selección es Sierra Cantabria Cuvée 2011. Se trata de un monovarietal de Tempranillo producido por Viñedos Sierra Cantabria.

 

Para terminar, no podía faltar un blanco de López de Heredia-Viña Tondonia, una de las bodegas históricas de la región. Un monovarietal de Viura, Viña Gravonia Crianza Blanco 2006 demuestra, por si fuera necesario, que en La Rioja también se producen algunos de los mejores blancos de España.

 

Hasta la próxima entrada,

Disfrutad del vino